¿Qué tiene de bueno hacer unas prácticas en Irlanda/Dublín? Bueno, probablemente lo más sorprendente para los becarios a lo largo de los años ha sido la gente de Irlanda.

Una de las cosas más bonitas de Irlanda es su gente y su enfoque amistoso y relajado de la vida laboral. La falta de jerarquías estrictas en el lugar de trabajo hace que todos se sientan bienvenidos y parte del equipo. Hay menos segregación social en el lugar de trabajo y, sin importar el estatus/posición de cualquier persona, todo el mundo se llama por su nombre (no por su «apellido»). Lo cual es diferente de muchos otros países europeos. Por supuesto, hay que trabajar, pero este ambiente amistoso ayuda a los becarios a sentirse más cómodos en su papel en el trabajo, ya que les da una sensación de apoyo mientras aprenden nuevas habilidades; se les hace sentir bienvenidos, y entienden que una actitud amistosa es la clave del éxito dentro de las prácticas.

La ciudad de Dublín también tiene un rico y variado patrimonio con algunos elementos culturales e históricos muy interesantes. También está el aspecto social de Dublín: no es una ciudad enorme como París/Londres/Roma, por lo que se puede recorrer a pie, y la mayoría de las principales atracciones, o zonas de vida nocturna, están a poca distancia del centro de la ciudad.

No hace falta mencionar el clima